Conversando el otro día con mi hermana, pensamos en las distintas razones por las que nosotras preferimos consumir productos orgánicos, y pudimos hacer una pequeña lista que ahora compartimos con ustedes.

1. Consumir productos orgánicos disminuye el impacto negativo en el medio ambiente. ¿Sabían que los campos de cultivo industrializados usan un gran número de fertilizantes sintéticos y pesticidas tóxicos? Bueno, la mayoría de estos fertilizantes y pesticidas están hechos de combustibles fósiles por lo que su producción genera gases de invernadero. Además, el exceso de fertilizantes que se usan en estos campos llegan a los ríos y océanos, produciendo lo que se llaman “zonas muertas” (zonas donde no hay suficiente oxígeno para que la vida marina pueda subsistir). Así, al consumir productos orgánicos estamos ayudando a combatir el cambio climático y a proteger nuestros océanos.

2. Los productos orgánicos no tienen un impacto negativo en la salud. Yo no sé qué piensan ustedes, pero mi hermana y yo preferimos no consumir combustibles fósiles (eso de comer petróleo no va con nosotras).

3. En cuanto a los pesticidas, el uso de grandes dosis para controlar las enfermedades de las cosechas conducen a una peligrosa resistencia de éstas a ciertas plagas y bacterias. Así, mientras se curan ciertas pestes hay algunas que logran sobrevivir y reproducirse, creando lo que se llaman “súper bacterias”. En las cosechas orgánicas no se utiliza ningún tipo de pesticida o fertilizante sintético ni agresivo.

4. Los productos orgánicos protegen la biodiversidad. Este tipo de agricultura provee hábitats naturales para aves e insectos beneficiosos para el ecosistema, entre los que se incluyen a los polinizadores como las abejas. Muchos pesticidas atacan no sólo a las plagas que pueden afectar a los cultivos sino a toda la biodiversidad de un ecosistema. Imagínense un mundo donde no existan las abejas, ¿quién polinizará nuestras plantas y flores? Esta diversidad es esencial para un ecosistema sano, y al consumir productos orgánicos estamos ayudando a que esto suceda.

5. Las personas que trabajan en las granjas orgánicas están mejor protegidas pues no se ven expuestas a los pesticidas tóxicos y a un envenenamiento progresivo que podría conducir a enfermedades como el cáncer.

6. En muchos casos consumir orgánico es consumir local y consumir fresco. ¿Qué significa esto? Primero que nuestra comida no ha tenido que recorrer miles de kilómetros y muchas semanas para poder ser parte de nuestro plato, perdiendo valor nutricional en el camino. Además, estamos ayudando a nuestros pequeños y medianos agricultores, y estamos reafirmándoles que la opción que tomaron de producir orgánico es la mejor para ellos, para nosotros y para el planeta.

Ahora que ya sabemos qué es un producto orgánico y cuáles son sus beneficios ¡Anímense a ir a una de las ferias orgánicas que se organizan por su barrio! Consuman natural, orgánico y local. Así estarán protegiendo su salud, ayudando al medio ambiente y a nuestros agricultores.